Aquí, en la plazuela de San Martín, la Casa del Almirante condensa el siglo del comercio indiano gaditano. Diego de Barrios, almirante de la Flota de Indias, impulsó sus obras en 1685, en pleno auge atlántico. La casa se alzó como hito urbano y mercantil: dos torres-miradores en las esquinas —entre las más antiguas conservadas en la arquitectura civil de Cádiz— y una portada barroca de mármol rojizo que ordena la plaza con columnas salomónicas y el escudo de los Barrios. No es solo fachada: representa el modelo de casa de cargador a Indias que vertebró el casco histórico.
Hoy el inmueble goza de la protección de Bien de Interés Cultural, e integra el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. La web municipal lo ubica en Plaza de San Martín, 3 y lo señala “cerrado temporalmente”. A partir de este contexto oficial, el artículo recorre su origen, su devenir y los detalles arquitectónicos que aún explican la identidad de Cádiz.
Origen y promotor
El capitán Diego de Barrios Soto, destacado cargador a Indias, promovió la casa a finales del siglo XVII. En 1681 instituyó un mayorazgo a favor de su primogénito Ignacio de Barrios, almirante de la Flota de Indias, e incorporó la “casa nueva” a ese vínculo pocos años después. La parcela se formó comprando varias fincas contiguas; en 1685 ya se derribaba la edificación previa para alinear la nueva fachada con la calle. La casa toma su nombre del cargo del heredero.
Arquitectura exterior de la casa del Almirante
La fachada principal domina la plazuela con un gran portón marmóreo en dos cuerpos. Abajo, columnas toscanas enmarcan el vano de acceso; arriba, columnas salomónicas flanquean el balcón central y un frontón curvo acoge el escudo de los Barrios. En los ángulos rematan dos torres-miradores tempranas, consideradas de las más antiguas conservadas en la arquitectura civil gaditana; servían para el recreo y para vigilar los movimientos del puerto.
Nota de investigación: durante décadas se dio por hecho que la portada era “de mármoles genoveses”. Un estudio reciente con documentación de obra matiza esa idea: maestros y canteros españoles habrían labrado y montado la portada con mármoles mayoritariamente andaluces. La abundante presencia de obras genovesas en Cádiz no contradice este caso particular.
Arquitectura interior
Se accede por un zaguán que lleva a un patio con tres frentes de arcos de medio punto sobre columnas de mármol rojizo. En un lateral se encuentran dos brocales de pozo en mármol blanco con mascarones. Desde el patio arranca una escalera monumental, “de tipo conventual”, en caja rectangular cubierta por bóveda oval sobre pechinas con yeserías; los peldaños son de mármol y la baranda de madera torneada. La planta noble se abre paralela a la fachada y conserva un techo con el escudo familiar pintado al fresco. Bajo el suelo hay dos aljibes comunicados. La distribución responde al modelo gaditano: bajos de almacén, entresuelo de oficinas, planta principal para la familia y superior para el servicio.
Devenir histórico de la casa del Almirante
Levantada en el último cuarto del XVII, la casa fijó su imagen actual tras sumar parcelas y alinear fachada con la traza de la plaza. A lo largo del tiempo sufrió particiones y cambios de uso típicos de la vivienda mercantil. En 2005 la Junta de Andalucía la declaró Bien de Interés Cultural, reconocida como pieza clave de la casa de cargador a Indias en Cádiz. Desde entonces ha conocido varios intentos de rehabilitación: las obras arrancadas a comienzos de siglo quedaron interrumpidas y años después se relanzaron con un nuevo proyecto hotelero.
Estado actual
El Ayuntamiento de Cádiz la señala “cerrada temporalmente” (dirección: Plaza de San Martín, 3). En 2024 la prensa local informó de la reactivación de obras con vistas a su uso hotelero, tras paralizaciones previas; a falta de comunicación oficial definitiva, el inmueble sigue sin visita pública.
Anécdotas verificadas (y lo que nos revelan)
- Pinturas y relieves ocultos. En 2009, durante una intervención de restauración, salieron a la luz frescos del siglo XVII y se recuperó la lectura de la gran cúpula de la escalera; hallazgos que han permitido comprender mejor los acabados originales del patio y paramentos.
- Torres que miran al mar. Las torres-miradores de la Casa del Almirante anticipan los modelos de “torre de terraza” tan gaditanos del XVIII. No eran adorno: daban información comercial a sus dueños sobre el tráfico del puerto.
Por qué importa
La Casa del Almirante es pieza de referencia para leer el tránsito de Cádiz hacia la modernidad comercial. Su portada de mármol, su escenografía barroca y la organización funcional del interior explican la cultura material de los cargadores a Indias. La tutela BIC garantiza su preservación; queda culminar una rehabilitación respetuosa que concilie uso contemporáneo y valores patrimoniales.
Mármol y marea: un paseo fotográfico por la Casa del Almirante
Esta galería recorre, paso a paso, la identidad del palacio: el frente barroco que se abre a la plazuela de San Martín, la portada de mármol con sus columnas salomónicas y el escudo de los Barrios, las torres-miradores recortadas contra el cielo atlántico, y una secuencia de detalles —texturas del mármol rojizo, clavos y carpinterías, mascarones de los brocales de pozo— que revelan el pulso mercantil de la casa. Cuando ha sido posible documentarlo, se incorporan vistas del patio de arcos, la escalera monumental bajo cúpula y las yeserías que la envuelven. El objetivo: mirar Cádiz desde su piedra, su luz y su memoria.
Fuentes oficiales y académicas consultadas
- BOJA: Decreto 102/2005, de 11 de abril, por el que se declara BIC la Casa del Almirante (descripción arquitectónica, función de las torres, distribución interior).
- Ayuntamiento de Cádiz (Turismo): ficha del monumento (autoría, fecha, síntesis formal, estado de visita y dirección).
- IAPH – Junta de Andalucía: ficha patrimonial y fotografías históricas.
- Alonso de la Sierra Fernández (2023), Laboratorio de Arte: estudio documental de portada y acabados, con revisión de autoría y procedencia de mármoles y noticias de obra recientes.
- Prensa local (para el dato de reactivación de obras): Diario de Cádiz, 18/01/2024.
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