Las noticias más antiguas de las que se tiene registro de una cárcel en la ciudad de Jerez de la Frontera, se remonta al año 1468. Lo que no parece estar muy claro es si se trataba de la rehabilitación de una prisión que ya existía en la época, o una de nueva planta.
Aquel edificio no sólo funcionaba como cárcel, sino también como Audiencia, quedando las cuadras para los caballos de los funcionarios en donde hoy se levanta el palacio de la Condesa de Casares.
Con todo, la situación debía ser penosa para quienes se encontraba presos entre sus muros y a los que servían en esta institución medieval de justicia. El caso es que se planeó y llevó a cabo la compra de unos corrales que había a espaldas del edificio con el fin de realizar una ampliación del mismo.
Tiempo después hubo un intento de trasladar la cárcel a otra ubicación, proyecto que finalmente acabó fracasando. Lo cierto es que se mantuvo en el emplazamiento que hoy conocemos hasta el siglo XIX. La audiencia, sin embargo, si que se trasladó, a mediados del XVI a la casa de Corregidores, lugar en el que hoy se encuentra el colegio Miguel de Cervantes.
Hoy os comparto algunas fotografías de la fachada del edificio del que os he venido hablando en esta entrada de mi blog.
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