El pasado día 5 de mayo, se celebró en Martos la fiesta dedicada a su patrón: San Amador. Es uno de los santos que con más devoción entre los marteños, cuya sede se encuentra en la iglesia parroquial que lleva su nombre, en pleno centro histórico de la localidad tuccitana.
Amador de Tucci, natural de esta ciudad jiennense, fue un sacerdote y mártir católico. Fue ejecutado en Córdoba, durante la invasión musulmana de la península ibérica, y es el primer Santo de la Diócesis de Jaén y patrón de Martos.
Su origen se remonta al siglo IX. Hijo de padres cristianos, a pesar de que por entonces Tucci, la actual Martos, se encontraba bajo el dominio del imperio árabe,
Siendo aún muy joven, se trasladó a Córdoba a estudiar, acompañado de su familia. Fue un estudiante aplicado y consiguió ser ordenado sacerdote.
A pesar de que, en aquella época existía una abierta persecución de los cristianos, Amador junto a dos amigos decidieron predicar el Evangelio. Por esta causa, fueron apresados y condenados a muerte. A pesar de su fatal destino, no flaquearon ni su Fe en Cristo ni sus convicciones.
Fueron ejecutados un 30 de abril del año 855, siendo su cuerpo arrojado al río Guadalquivir.
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