Nos remontamos a una época en la que aun Cádiz estaba dividida en dos islas separadas por un canal Bahía-Caleta, que hacía las veces de muelle comercial. Allá por el siglo I a.C se construyó en este lugar un complejo industrial dedicado a la fabricación de salazones.
Los restos del enclave que ha llegado hasta nosotros se encuentran donde, en la actualidad, se levantaba el teatro Andalucía.
Su presencia da testimonio del auge que, en aquella época, tenía Gades, tanto demográfica como económicamente. Probablemente, supuso una de las actividades productivas más importantes de la ciudad y que dio renombre a la actual Cádiz en toda la cuenca mediterránea.
Ni que decir tiene que también supuso para las poblaciones de alrededor una relevante actividad industrial auxiliar, tan necesaria para la exportación de las salazones por todo el que por entonces era el Imperio Romano.
Su funcionamiento se mantuvo activo hasta principios del siglo IV d.C, en el que se abandonó.
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