Buscando el pozo de la rúbrica, en pleno parque natural del pinar de la Algaida, me tropecé con este hallazgo del que quiero dejar un escrito en mi blog.
No tenía ni idea de la existencia esta infraestructura, pero trataré de explicarla. La vía de Decauville es un tipo de ferrocarril de vía estrecha y desmontable inventada en el año 1875 por el francés Paul Decauville. El objetivo era el transporte tanto de personas como de mercancías. Estos trenes iban arrastrados por pequeñas locomotoras o animales de tiro.
Existía una salina conocida como de San Fermín y San Francisco Javier, que era propiedad de la familia Goyena-Derqui, desde el siglo XVIII hasta su abandono definitivo en el XX. Allí existía, además, un molino mareal conocido con el nombre de Galacho o Goyena, del que ya he hablado en mi blog en otra ocasión.
Este conjunto al que me refiero requería de una infraestructura industrial para el traslado de sal, harina o cereal. Estas mercancías eran transportadas entre la finca y un embarcadero. Por este motivo, era necesario la instalación de una vía estrecha desmontable. El pequeño ferrocarril enlazaba los dos saleros de la salina, pasando por el molino, hasta llegar al embarcadero del río San Pedro.
De todo aquel complejo solo quedan las estacas del embarcadero en el río y los restos de un muro, un camino peraltado que sobre el que se colocaba la vía desmontable, tipo Decauville, con sus vagonetas que, probablemente, irían tiradas por bestias.
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