Capilla del Cortijo del Fraile - fotografía cortesía de Wikipedia
Capilla del Cortijo del Fraile - fotografía cortesía de Wikipedia

Nos encontramos frente a uno de los rincones que es obligado visitar de la zona del Cabo de Gata, no solo por lo singular de su entorno natural que rodea al edificio, también por la historia que hay detrás.

En un buen ejemplo de la encantadora arquitectura andaluza que, en este caso particular, destaca por sus dimensiones, que supera al resto de los que se han edificado en el entorno, también por la inusual tipología de estancias que allí se encuentran. No en vano, alrededor de un gran patio central se distribuyen las habitaciones de la vivienda. Pero, además, hay un aljibe, una cripta funeraria, cochineras, una capilla, cuadras y hasta hornos.

Su origen data del siglo XVIII, construido por frailes dominicos. Fue conocido en su tiempo como el cortijo del hornillo. La propiedad de los religiosos se mantuvo hasta el año 1836, momento en el que fue confiscado y pasó a ser gestionado por el Estado. Fue subastado y dedicado a labores agrícolas. Paulatinamente, se abandonó, quedando su mantenimiento en manos de un aparcero.

En este momento comienza la historia trágica acontecida en los muros del cortijo y que inspiró al mismísimo Federico García Lorca. Y hablamos del crimen de Níjar, en el año 1928.

Actualmente, el edificio está en manos de una empresa privada y, aunque fue declarado Bien de Interés Cultural, su estructura se encuentra deteriorada y en un estado de abandono.

Capilla del Cortijo del fraile, fotografía cortesía de Guille García
Capilla del Cortijo del fraile, fotografía cortesía de Guille García
Capilla del Cortijo del Fraile
Capilla del Cortijo del Fraile
Capilla del Cortijo del Fraile, fotografía cortesía de Keith Souter
Capilla del Cortijo del Fraile, fotografía cortesía de Keith Souter

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